En nuestro bufete de abogados civil está a la orden del día en estas cuestiones, por ejemplo:
- ¿Cuánto costaría tener que gastar días extras de vacaciones por que tu vuelo se ha retrasado?
- ¿Cuánto cuesta el daño psíquico que provoca la muerte de un familiar por fallar el mecanismo del Airbag?
- ¿Cuánto vale el trauma de abrir un alimento en un envase alimentario y encontrarte un insecto dentro?
Cuando los jueces hacen frente a cargos e indemnizaciones que afectan a los aspectos físicos de una persona, existen unas tablas en el BOE, donde dejan claro las equivalencias en precios de estos daños, una pierna rota en un accidente de tráfico, valdrá lo mismo para dos jóvenes que han sufrido un accidente de coche, por ejemplo. Hay matices diferenciados por edad, y género, pero salvo esos criterios es mucho más fácil el cálculo.
Pero cuando hay que poner precio a los sentimientos de una persona, por un caso cualquiera anteriormente expuesto, es a lo que todo juez se ha de afrontar para preparar la indemnización de los daños morales de dicha persona.
Una persona con fobia a los insectos, no reaccionará de la misma manera que un entomólogo, al ver una cucaracha dentro de una hamburguesa, por ejemplo. Probablemente no le gustará y reaccionará con cierto rechazo y posiblemente sobresalto, pero en cambio la que tiene fobia, será en su menor medida un trauma para el resto de su vida a la hora de desempaquetar una hamburguesa.
Para los jueces, el verbo con el que describe la persona afectada, ayuda a cuantificar ese daño moral. No es lo mismo decir que me asusté al ver una hormiga en el envase de comida, que llevo 3 meses que no consolido el sueño pensando que la próxima vez que vaya a comer a un restaurante de comida rápida y pida una hamburguesa me vuelva a encontrar una cucaracha.
- ¿Cómo calculan los expertos los daños ocasionados por herir los sentimientos de alguien? ¿Cuánto cuestan estos daños morales?
El principal problema de toda indemnización es que el daño moral es circunstancial, porque cada caso y cada persona son diferentes, como hemos comentado antes. Al ser un concepto abierto, los expertos en esta materia, indican que en el mejor de los casos, incluso se suelen hacer cuantificaciones aproximadas del daño causado por estos casos. La sociedad también está relacionada con el daño causado. Imaginemos el caso del familiar fallecido por el bloqueo del sistema de seguridad Airbag. La impotencia de quien ve el accidente, y de quien piensa que los sistemas de seguridad de un coche están para salvarnos la vida en caso de accidente, no funcionan, y que por culpa de un fabricante de estos sistemas, que no ha colocado correctamente y que no exista un 100% de fiabilidad, han ocasionado la pérdida de un familiar directo. Como esta persona podrá vivir el resto de su vida sabiendo que tanto él como su familiar podrían haber salido vivos de aquel acontecimiento y ya nadie podrá devolver a la vida a esta persona.
Según abogados civil, los criterios de partida a la hora de valorar los daños y calcular la indemnización se basan en métodos de cuantificación económica por daño moral que pueden sintetizarse en tres: la aplicación del baremo de accidentes de tráfico; la indemnización global de todos los daños, incluido el daño moral; y la determinación separada y cuantificada de cada una de las partidas del daño.
Los expertos coinciden la dificultad de calcular todos los elementos que afectan a la indemnización moral en estos casos, pero el tribunal supremo por otro lado, indica que esta dificultad no exime de negar esta valoración del daño moral.
Fuente: Periódico Digital